Luz Astral
Luz Astral es un término usado por el ocultista Francés Eliphas Levi para referirse al medio de toda luz, energía y movimiento, muy de acuerdo con la teoría del éter luminífero comúnmente sostenido en el siglo XIX. En su visión, la luz astral era una fuerza vital fluídica que llena todo el espacio y los seres vivos.
H. P. Blavatsky adoptó el término y lo usó en sus escritos. La Luz Astral no es un principio universal, pero pertenece a nuestro planeta. Siendo un aspecto inferior del Ākāśa universal, abarca el segundo, tercero y cuarto de los Planos Prakríticos, aunque a veces se caracteriza por ser solo el segundo plano, correspondiente con el Liṅga-śarīra en los seres humanos.
La Luz Astral recive las "impresiones" producidas en el plano Terrestre y conserva un registro de todo lo que sucede.También refleja los planos superiores. Sin embargo, por su naturaleza, las reflexiones son fragmentarias y engañosas. La Luz Astral responde a la fuerza de voluntad y, por lo tanto, puede utilizarse para producir algunos Por su naturaleza, las reflexiones son fragmentarias y engañosas. La Luz Astral responde a la fuerza de voluntad y, por lo tanto, puede utilizarse para producir algunos fenómenos ocultos y psíquicos.
Descripción General
La Luz Astral no es un principio universal, pero pertenece a nuestro planeta, abrazando a los tres Planos prakríticos inferiores no objetivos:
La Luz Astral es la que refleja los tres planos superiores de conciencia y está por encima del plano inferior o [[Plano#Solar o Planos Prakríticos|plano terrestre; por lo tanto, no se extiende más allá del cuarto plano, donde, se podría decir, comienza el Akâsa. Hay una gran diferencia entre la Luz Astral y el Akâsa que debe recordarse. El último es eterno, el primero periódico. La Luz Astral cambia no sólo con los Maha manvantaras, sino también con cada subperíodo y ciclo planetario o Ronda.[1]
La región invisible que rodea nuestro globo, como a todos los demás, y que corresponde, como segundo Principio del Kosmos (el tercero es Vida, de la que es el vehículo), al Linga Sharira o Doble Astral en el hombre. Una Esencia sutil visible sólo para un ojo clarividente, y la penúltima (es decir, la tierra) de los Siete Principios Akásicos o Kósmicos.[2]
La Luz Astral no es una materia universalmente difusa, sino que pertenece a nuestra Tierra y a todos los demás cuerpos del sistema que se encuentran en el mismo plano de materia que ella. Nuestra Luz Astral es, por así decirlo, el Linga-Sharîra de nuestra Tierra; sólo que en lugar de ser su prototipo primordial, como en el caso de nuestro Chhâyâ, o Doble, es lo contrario. Mientras que los cuerpos humanos y animales crecen y se desarrollan según el modelo de sus Dobles antetípicos, es la Luz Astral la que nace de las emanaciones terrestres, crece y se desarrolla según su progenitor prototípico.[3]</blockquote
La región invisible que rodea nuestro globo, como a todos los demás, y que corresponde, como segundo Principio del Kosmos (el tercero es Vida, de la que es el vehículo), al Linga Sharira o Doble Astral en el hombre. Una Esencia sutil visible sólo para un ojo clarividente, y la penúltima (es decir, la tierra) de los Siete Principios Akásicos o Kósmicos.[4]
La Luz Astral no es una materia universalmente difusa, sino que pertenece a nuestra Tierra y a todos los demás cuerpos del sistema que se encuentran en el mismo plano de materia que ella. Nuestra Luz Astral es, por así decirlo, el Linga-Sharîra de nuestra Tierra; sólo que en lugar de ser su prototipo primordial, como en el caso de nuestro Chhâyâ, o Doble, es lo contrario. Mientras que los cuerpos humanos y animales crecen y se desarrollan según el modelo de sus Dobles antetípicos, es la Luz Astral la que nace de las emanaciones terrestres, crece y se desarrolla según su progenitor prototípico.[5]</blockquote
La "Gran Serpiente"
- ↑ Helena Petrovna Blavatsky, Escritos Recolectados vol. X (Wheaton, IL: Editorial Teosófica, 1988), 360-361.
- ↑ Helena Petrovna Blavatsky, El Glosario Teosófico (Krotona, CA: Editorial Teosófica, 1918), 35.
- ↑ Helena Petrovna Blavatsky, Escritos Recolectados vol. XII (Wheaton, IL: Editorial Teosófica, 1980), 613.
- ↑ Helena Petrovna Blavatsky, El Glosario Teosófico (Krotona, CA: Editorial Teosófica, 1918), 35.
- ↑ Helena Petrovna Blavatsky, Escritos Recolectados vol. XII (Wheaton, IL: Editorial Teosófica, 1980), 613.