Plano

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Plano es un termino que en algunas filosofías esotéricas y espirituales es utilizado para referirse a una localidad o dimensión, que puede ser física o no-física. La fuente original de la palabra "plano" en este contexto parece ser el último Neoplatónico Proclus, quien frecuentemente usó la palabra platos (πλάτος) que significa "amplitud, anchura, extensión, espaciosidad," como en la expresión en to psuchiko platei.[1]

Definición

H. P. Blavatsky definió la palabra plano como sigue:

Plano. De la palabra Latina planus (nivel, plano) una extensión de espacio o de algo en él, ya sea físico o metafísico, por ejemplo, un “plano de conciencia”. Tal como se usa en Ocultismo, el término denota el rango o extensión de algún estado de conciencia, o del poder de percepción de un conjunto particular de sentidos, o de la acción de una fuerza particular, el estado de materia correspondiente a cualquiera de las anteriores.[2]

Annie Besant explicó:

Un plano puede definirse como un estado marcado por características claras; no debe ser pensado como un lugar, [Página 9] como si el universo estuviera hecho por cascaras una dentro de la otra, como las capas de una cebolla. La concepción es metafísica, no física, la conciencia actuando en cada plano de manera apropiada para cada plano.[3]

Siete planos

Planes - HPB.jpg

La literatura Teosófica postula que el universo es septenario:

Nuestra filosofía nos enseña que, así como hay siete fuerzas fundamentales en la naturaleza y siete planos del ser, así hay siete estados de conciencia en los que el hombre puede vivir, pensar, recordar y tener su ser.[4]

Esta estructura septenaria se repite a nivel del universo, el sistema solar, la tierra, el ser humano, etc. Aunque los planos universales superiores están más allá de la concepción humana, los inferiores están dentro del alcance del esfuerzo humano:

Creyendo en siete planos del ser Cósmico y estados de Conciencia, con respecto al Universo o al Macrocosmos, nos detenemos en el cuarto plano, encontrando imposible ir más allá con algún grado de certeza. Pero con respecto al Microcosmos, u hombre, especulamos libremente sobre sus siete estados y principios.[5]

Planos Macrocósmicos o Solares

H. P. Blavatsky describió el universo manifestado y todo en él como septenario. Ella afirmó que los estados de conciencia en el universo como un todo (frecuentemente llamado por ella "Cosmos") estaba más allá de la posibilidad de explicación. Por lo tanto, ella se limitó a describir los siete principios en el sistema solar (llamado macrocosmos) que son reflejados en el ser humano (microcosmos):

El estudiante observará que el estudio de los Estados de Conciencia se limitan a la Conciencia tal como se manifiestan en el sistema solar. Cualquier intento de imaginar la Conciencia en el COSMOS habría engañado al estudiante induciéndolo a creer que tal Conciencia Cósmica podría ser explicada, mientras que la totalidad del plano más bajo del Kosmos trasciende al Adepto más alto en la tierra.[6]

Macrocosmic Planes.jpg

7º- Envoltura Áurica o Átmica: Este es el Huevo Áurico Cósmico, también llamado Hiraṇyagarbha

6º- Ālaya: El Alma Universal o Super-alma.

5º- Mahat: La Mente Universal o Pensamiento Divino.

4º- Fohat: La Energía Cósmica

3º- Jiva: La Vida Universal.

2º- Astral: El modelo Astral, reflexionando sobre los planos inferiores.

1º- Prakriti: El plano físico del sistema solar, que a su vez se divide en siete sub planos.

Este diagrama representa el tipo de sistema solar.

Las tres divisiones más elevadas de este plano son inconcebibles para nosotros, y son sólo alcanzadas por los Adeptos más elevados en Samadi. Esotéricamente, Samadi es el estado más elevado en la tierra alcanzable mientras se está en el cuerpo. Además de que el Iniciado debe convertirse en un Nirmânakâya. El Adepto más elevado comienza su Samadi en el cuarto plano macro cósmico, y no puede salir del Sistema Solar. Cuando tal Adepto comienza su Samadi, está a la par con algunos de los Dhyâni-Chohans, pero los trasciende a medida que asciende al séptimo plano, Nirvana.
El “OBSERVADOR SILENCIOSO” [ver La Doctrina Secreta, Vol. I, pp. 207, 208] es en el cuarto plano.

El Buda-Pratyeka, el Buda del Egoísmo––llamado a causa de este egoísmo espiritual “el rinoceronte”, el animal solitario– nunca puede pasar más allá del tercer plano, el del Jiva. Tal persona ha conquistado, ciertamente, sus deseos materiales, pero aún no se ha liberado de sus anhelos mentales y espirituales. Sólo el Buda de la Compasión puede trascender este tercer plano macro cósmico.[7]

Aunque los seres humanos no pueden percibir estos planos más elevados, existe una correspondencia entre ellos y sus principios, y por lo tanto, ellos pueden experimentar su reflejo en su propio nivel:

Estos siete planos corresponden a los siete estados de conciencia en el hombre. Le corresponde a él sintonizar los tres estados superiores en sí mismo con los tres planos superiores en el Cosmos. Pero antes de que pueda intentar sintonizarse, debe despertar las tres "moradas" a la vida y la actividad.[8]

Planos Prakríticos

El plano macrocósmico, más bajo, o primero, se llama "prakrítico":

Prakriti, el plano más bajo de la conciencia macrocósmica, representa el "cuerpo" del sistema solar, con sus propias subdivisiones, o los siete estados de conciencia prakrítica, cada una correspondiendo a un estado de conciencia macro cósmica de conciencia.[9]

Este plano está también dividido en siete sub-planos, como sigue:

6°, o Aláyico-Prakrítico

5°, o Mahático

4°, o Fohático

3°, o Jívico

2°, o Astral

1°, u Objetivo

Mme. Blavatsky solamente explicó los diferentes estados de conciencia experimentados en el plano Prakrítico Astral y el Prakrítico Objectivo, o Terrestre (ver abajo).

Según C.W. Leadbeater

C. W. Leadbeater explicó la relación entre los planos terrenales y el Prakrítico como sigue:

Cada globo físico tiene su plano físico (incluyendo su atmósfera), su plano astral, y su plano mental, todos interpenetrándose unos a otros, y por lo tanto ocupando la misma posición en espacio, sin embargo bastante aparte de y no comunicándose con los planos correspondientes de ningún otro globo. Es sólo cuando nos elevamos a los elevados planos del plano búdico que nosotros encontramos una condición común, de todos modos, a todos los planos de nuestra cadena.
No obstante esto, hay, como se dijo anteriormente, una condición de la materia atómica de cada uno de estos planos que es cósmica en su extensión; de modo que se puede decir que los siete sub-planos atómicos de nuestro sistema, separados del resto, constituyen un plano cósmico: el más bajo, a veces llamado el prakrítico-cósmico. El éter inter-planetario, por ejemplo, que parece extenderse por todo el espacio -de hecho debe hacerlo, al menos hasta la estrella visible más lejana, de lo contrario nuestros ojos físicos no podrían percibir esa estrella- está compuesto de átomos físicos últimos en su condición normal y sin comprimir. Sin embargo, las formas mas inferiores y más complejas de éter existen sólo (hasta donde se sabe en la actualidad) en conexión con los diversos cuerpos celestes, agregados alrededor de ellos tal como su atmósfera es, aunque probablemente, extendiéndose considerablemente más lejos de su superficie..[10]

Planos Terrestres

El primero, o más bajo del plano prakrítico, es denominado el Prakrítico Objetivo o Terrestre. También es dividido en siete sub-planos como sigue:

7. Conciencia Atmica, la del Para-Ego.

6. Búdico, Ego-Interno.

5. Manásico, Ego Superior o Ego Individual

4. Kama-Manásico, Ego Personal o Ego Físico Superior

3. Pránico-Kámico o Físico (instinto)

2. Astral (las cosas están al revés)

1. Objetivo (plano de los sentidos)

Los planos de conciencia en los siete sub-planos de este plano Terrestre han sido descritos como sigue:

1. Conciencia Sensorial Objetiva. La conciencia que se refiere a los cinco sentidos físicos en el hombre y reglas en los animales, pájaros, peces, y algunos insectos, etc. Aquí están las “Vidas”; su conciencia está en Âtma-Buddhi; están completamente sin Manas.

2. Conciencia Instintiva Astral. La conciencia de plantas sensibles, de hormigas, arañas y algunas moscas nocturnas (indias), pero no de abejas. Entre otros animales, los vertebrados no mamíferos carecen de esta conciencia, pero los mamíferos placentarios tienen todas las potencialidades de la conciencia humana, aunque, por supuesto, dormida o latente en la actualidad. En este plano está la conciencia de los idiotas. La frase común, "ha perdido la cabeza", es una verdad oculta; pues cuando, por miedo u otra causa, la mente inferior se paraliza, entonces la conciencia actúa en el plano astral. El estudio de la locura arrojará mucha luz sobre este punto. Esto bien podría llamarse el “plano nervioso”. Es conocido por nuestros "sentidos nerviosos", de los cuales, hasta ahora, la fisiología moderna no sabe nada. Por eso es que un clarividente puede leer con los ojos vendados, con la punta de los dedos, con la boca del estómago, etc. Esta conciencia está muy desarrollada en los sordomudos. En este plano todo está al revés, reflejado al revés.

3. Conciencia Kâma-Pránica o Fisiológica-Emocional. Esta es la conciencia de vida general que pertenece al mundo objetivo, incluso a la piedra; porque si las piedras no estuvieran vivas, no podrían descomponerse, desmoronarse ni emitir una chispa. La afinidad entre los elementos químicos es una manifestación de esta conciencia Kâma-Pránica. A este plano pertenecen también los instintos de conservación de la vida, como por ejemplo el que impide que un gatito se meta en el agua y se ahogue. [Una piedra no podría desmoronarse a menos que hubiera vida a lo largo de ella; porque el desmoronamiento no se debe sólo a la fricción del agua, aire, etc., o a la acción de la escarcha, sino al hecho de que cada partícula en la piedra está en un estado de vibración activa, realizando movimientos rítmicos, no en un estado de inercia. Estas ondas de vida, que pulsan en la piedra, separan sus moléculas, permitiendo así que materias e influencias extrañas entren entre ellas, forzándolas a separarse más y provocando así que se desmoronen. Incluso esto no es todo: la acción vibratoria de la vida misma, aparte de cualquier interferencia externa, tiende a desbaratar en última instancia las combinaciones de moléculas que forman la piedra.]

4. Conciencia Kâma-Mânásica, o Psíquica, o Pasional-Emocional. En los animales y los idiotas, la conciencia instintiva en los planos inferiores de sensación se encuentra en este estado; en el hombre estos están racionalizados. Por ejemplo, si un perro está encerrado en una habitación, tiene el instinto de salir, pero no puede hacerlo porque este instinto no está suficientemente racionalizado para tomar los medios necesarios para su liberación. Un hombre inmediatamente se da cuenta de la situación y se deja salir. Los grados más altos de esta conciencia Kâma-Mânásica son psíquicos, existiendo dentro de este sub-plano, como en todos los demás, siete grados desde el instintivo y psíquico.

5. Conciencia Manásica o Mental-Emocional. Desde este plano Manas se extiende hasta Mahat.

6. Conciencia Búdica, o Spiritual Emocional. El plano de Budi o de la Envoltura Áurica. Desde este plano la conciencia va al “Padre en el Cielo”, Âtman, reflejando todo lo que está en la Envoltura Áurica. Los estados Manásico y Búdico cubren los planos desde el Noético hasta el Divino, pero es imposible en esta etapa definirlos inteligiblemente. Llama al plano más alto x si quieres. No puedes entenderlo.[11]

En las enseñanzas del "Grupo Interno" se proporcionó la siguiente información adicional:[12]

1. Este plano objetivo o sensorial es el que se percibe con los cinco sentidos físicos.

2. En su segundo plano, los objetos están invertidos.

3. Su tercer plano es psíquico, aquí está el instinto que impide que un gatito se meta al agua y se ahogue.

Se entregó la siguiente tabla de la conciencia terrestre:

1. Sensual

2. Instintiva

3. Emocional fisiológica

4. Apasionada

5. Mental

6. Espiritual

7. X

Estados humanos de conciencia

Los seres humanos somos el microcosmos del macrocosmos. También muestran una conciencia septenaria:

Esta figura representa la conciencia humana, que puede estar en cualquiera de los planos o sub planos de Prakriti. Los nombres representan las correspondencias de los principios humanos, así llamados, con los estados de conciencia prakríticos y macro cósmicos.[13]

Human States of Cosnciousness.JPG

7º Áurico o Átmico

6º Búdico-Manásico

5° Manásico

4º Kama-Manásico

3° Kama-Pránico

2°Astral

1° objetivo

Estos estados de conciencia tienen lugar en cualquiera de los planos Prakríticos.

Enseñanzas posteriores

Annie Besant y C. W. Leadbeater ofrecieron una organización modificada de los planos, no basada en los diferentes estados de conciencia posibles en ellos, como H. P. Blavatsky, sino en el tipo de materia que los compone. Por lo tanto, consideraban que los planos manásico y kama-manásico eran realmente uno solo, el plano mental, que puede subdividirse en superior (manásico) e inferior (kama-manásico). Su plano Astral incluía el Pránico-Kámico y el Astral de Blavatsky (o al menos sus sub-planos superiores), mientras que el plano físico podía subdividirse en dos: la mitad "densa" (que se corresponde con el "objetivo"), y el etérico ( lo que probablemente corresponde con los sub-planos inferiores del "astral" de Blavatsky. Budi y Atman siguen siendo los mismos.

Ver también

Recursos en Linea

Artículos y pamfletos

Notas

  1. J. J. Poortman, Vehículos de Conciencia vol. II (Utrecht, Países Bajos: La Sociedad Teosófica en los Países Bajos 1978), 54
  2. Helena Petrovna Blavatsky, Glosario Teosófico (Krotona, CA: Theosophical Publishing House, 1973), 6.
  3. Annie Besant, Un Bosquejo Aproximado de la Teosofía (Adyar, Madras: Theosophical Publishing House, 1921), ???.
  4. Helena Petrovna Blavatsky, La Clave de la Teosofía, (London: Theosophical Publishing House, 1987), 89.
  5. Helena Petrovna Blavatsky, Key to Theosophy, (Londres: Theosophical Publishing House, 1987), 90.
  6. Helena Petrovna Blavatsky, Collected Writings vol. XII (Wheaton, IL: Theosophical Publishing House, 1980), 657.
  7. Helena Petrovna Blavatsky, Collected Writings vol. XII (Wheaton, IL: Theosophical Publishing House, 1980), 658-659.
  8. Helena Petrovna Blavatsky, Secret Doctrine vol. I, (Wheaton, Ill: Theosophical Publishing House, 1993), 199
  9. Helena Petrovna Blavatsky, Collected Writings vol. XII (Wheaton, IL: Theosophical Publishing House, 1980), 659.
  10. C. W. Leadbeater, The Devachanic Plane
  11. Helena Petrovna Blavatsky, Collected Writings vol. XII (Wheaton, IL: Theosophical Publishing House, 1980), 661-662.
  12. Henk J. Spierenburg (compilador), The Inner Group Teachings of H. P. Blavatsky (San Diego, CA: Point Loma Publications, Inc., 1995), 29
  13. Helena Petrovna Blavatsky, Collected Writings vol. XII (Wheaton, IL: Theosophical Publishing House, 1980), 659.