Carta de los Mahatmas No. 66
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Esta es la Carta N.° 66 en Las Cartas de los Mahatmas a A.P. Sinnett, 4.ª edición cronológica (en inglés). Corresponde a la Carta N.° 14 en la numeración de Barker. Ver a continuación contexto y antecedentes No hay diapositivas de color disponibles, pero se han tomado imágenes en blanco y negro del microfilm.
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Página 1 - traducción, imagen y notas
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[Transcrito de una copia con letra del Sr. Sinnett — ED.] [Las respuestas de KH están en negrita] Carta de K.H. con Respuestas a Preguntas. Recibida por AOH, el 9 de julio de 1882. (1) Entendemos que el ciclo de necesidad de gestación en el hombre de nuestro sistema solar está compuesto de trece globos objetivos, de los cuales el nuestro es el más bajo, seis por encima de este en el ascendente, y seis en el ciclo descendente con un decimocuarto mundo aún inferior al nuestro. ¿Es esto correcto? (1) El número no es del todo correcto. Existen siete globos objetivos y siete subjetivos (se me acaba de permitir por primera vez darle la cifra correcta), los mundos de las causas y de los efectos. En los primeros nuestra Tierra ocupa el punto de inflexión inferior donde la materia-espíritu se equilibra. Pero no se moleste en hacer cálculos
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incluso sobre esta base correcta ya que solo lo desconcertará, debido a que las infinitas ramificaciones del número siete (que es uno de nuestros más grandes misterios) están muy estrechamente aliadas y son interdependientes con los siete principios de la Naturaleza y el hombre: esta cifra es la única que se me permite darle (hasta ahora). Lo que puedo revelar lo hago en una carta que acabo de terminar. (2) Entendemos que por debajo del hombre usted no reconoce tres reinos como nosotros (mineral, vegetal y animal) sino siete. Por favor enumérelos y explíquelos. (2) Por debajo del hombre hay tres en la región objetiva y tres en la subjetiva, con el hombre un septenario. Dos de los tres primeros nadie excepto un
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iniciado podría concebirlos; el tercero es el Reino Interior, debajo de la corteza de la Tierra el cual podríamos nombrar pero nos sentiríamos avergonzados de describir. Estos siete reinos están precedidos por otras y numerosas etapas septenarias y combinaciones. (3) Entendemos que la mónada, comenzando en el mundo más elevado de la serie descendente, aparece allí en una envoltura mineral, y allí pasa a través de una serie de siete envolturas que representan las siete clases en las que se divide el reino mineral, y que hecho esto pasa al siguiente planeta y hace lo mismo (intencionalmente no digo nada sobre los mundos de los resultados, donde obtiene en el desarrollo el resultado de
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aquello por lo que ha pasado en el último mundo y la preparación necesaria para el siguiente) y así sucesivamente a través de las trece esferas, haciendo en total 91 existencias minerales. (a) ¿Es esto correcto? (b) Si es así, ¿cuáles son las clases que debemos tener en cuenta en el reino mineral? Además (c) ¿Cómo sale la mónada de una envoltura a otra; en el caso de las inherbaciones y encarnaciones, la planta y el animal mueren, pero hasta donde sabemos el mineral no muere, así que ¿cómo pasa la mónada en la primera ronda de una inmetalación a otra? (d) ¿Y cada molécula separada del mineral tiene una mónada o solo esos grupos de moléculas donde se puede observar una estructura definida como los cristales? (3) Sí; en nuestra sarta de mundos comienza en el globo "A" de la serie descendente
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y pasando por todas las evoluciones preliminares y combinaciones de los tres primeros reinos se encuentra envuelta en su primera forma mineral (en lo yo que llamo raza cuando se habla del hombre y lo que podemos llamar clase en general) —de la clase 1— allí. Sólo pasa a través de siete en lugar de "a través de las trece esferas" incluso omitiendo los "mundos de resultados" intermedios. Habiendo pasado a través de sus siete grandes clases de inmetalación (una buena palabra esta) con sus ramificaciones septenarias, la mónada da a luz el reino vegetal y pasa al siguiente planeta "B." (a) Como usted ve ahora, excepto en cuanto a los números. (b) Los geólogos
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dividen, creo, las rocas en tres grandes grupos: de Arenisca, granito y caliza; o las sedimentarias, orgánicas e ígneas, según sus características físicas al igual que los psicólogos y espiritistas dividen al hombre en la trinidad de cuerpo, alma y espíritu. Nuestro método es totalmente distinto. Clasificamos los minerales (y también los demás reinos) según sus propiedades ocultas, es decir, según la proporción relativa de los siete principios universales que contienen. Lamento negarme, pero no puedo, no se me permite responder a su pregunta. Para facilitarle una cuestión de simple nomenclatura, sin embargo, le aconsejaría que
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estudiase perfectamente los siete principios del hombre, y entonces dividiera las siete grandes clases de minerales correspondientemente. Por ejemplo, el grupo de los sedimentarios respondería al cuerpo compuesto (desde el punto de vista químico) del hombre o su primer principio; el orgánico al segundo principio (algunos lo llaman el tercero) o jiva, etc., etc. Debe ejercitar sus propias intuiciones en eso. Por lo tanto también podría intuir ciertas verdades incluso en cuanto a sus propiedades. Estoy más que dispuesto a ayudarle pero las cosas tienen que divulgarse gradualmente. (c) Por ósmosis oculta. La planta y el animal dejan sus cadáveres cuando se extingue la vida.
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Lo mismo ocurre con el mineral sólo que a intervalos más largos, ya que su cuerpo rocoso es más duradero. Muere al final de cada ciclo manvantárico, o al final de una "Ronda" como ustedes la llaman. Se explica en la carta que estoy preparando para usted. (d) Cada molécula es parte de la Vida Universal. El alma del hombre (su cuarto y quinto principio) no es más que un compuesto de las entidades desarrolladas de los reinos inferiores. La superabundancia o preponderancia de un compuesto sobre otro a menudo determinará los instintos y pasiones de un hombre, a menos que estos sean controlados por la influencia apacible y espiritualizadora de su sexto principio.
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(4) Por favor, tenga en cuenta que nosotros llamamos al Gran Ciclo que ha realizado la mónada en el reino mineral una "ronda" que entendemos que contiene trece (siete) estaciones, o mundos objetivos, más o menos materiales. En cada una de estas estaciones realiza lo que llamamos un "anillo mundial", que incluye siete inmetalaciones, una en cada una de las siete clases de ese reino. ¿Se acepta esto como nomenclatura y es correcto? (4) Creo que conducirá a una mayor confusión. Una Ronda coincidimos en llamar al paso de una mónada del globo "A" al globo "Z" (o "G") a través de la envoltura o en todos y cada uno de los cuatro reinos, es decir, como un mineral, un vegetal, un animal y un hombre
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o el reino de Dévico. El "anillo mundial" es correcto. M. le aconsejó al Sr. Sinnett encarecidamente que acordara una nomenclatura antes de continuar. Unos cuantos hechos aislados le fueron dados hasta ahora par contrebande y sobre el principio de contrabando. Pero ahora dado que usted parece real y firmemente decidido a estudiar y utilizar nuestra filosofía, es hora de que comencemos a trabajar en serio. Porque estemos obligados a negar a nuestros amigos una visión de las matemáticas superiores no es razón por la que debamos negarnos a enseñarles aritmética. La mónada realiza no sólo "anillos del mundo" o siete inmetalaciones importantes, inherbaciones,
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zoonizaciones (?) y encarnaciones, sino una infinitud de subanillos o remolinos subordinados todo en serie de sietes. Así como el geólogo divide la corteza terrestre en grandes divisiones, subdivisiones, compartimentos menores y áreas; y el botánico sus plantas en órdenes, clases y especies, y el zoólogo sus sujetos en clases, órdenes y familias, de igual manera tenemos nuestras clasificaciones arbitrarias y nuestra nomenclatura. Pero además de que todo esto le resulte incomprensible, tendrían que escribirse un volumen tras otro de los Libros de Kiu-te y otros. Los comentarios de estos son aún peores. Están llenos de los cálculos matemáticos más abstrusos
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Nota al pie de Las cartas de los Mahatmas a A. P . Sinnett, cronológicas, ed. Vincente Hao Chin, Jr. |
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la clave de la mayoría de los cuales están solamente en manos de nuestros más elevados adeptos, ya que al mostrar de esa manera la infinitud de manifestaciones fenoménicas en las proyecciones laterales de la Fuerza única entonces son secretos. Por lo tanto, dudo si se me permitirá darle por el momento algo más allá de la mera idea unitaria o fundamental. De todos modos, haré lo que pueda. (5) Entendemos que en cada uno de los otros seis reinos, una mónada realiza de manera similar una ronda completa, en cada ronda se detiene en cada una de las trece estaciones, realizando allí en cada una un anillo mundial de siete vidas, una en cada una de las siete clases en las que se divide cada uno de los seis
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reinos mencionados. ¿Es esto correcto, y, de ser así, nos daría usted las siete clases de estos seis reinos? (5) Si por reinos se entiende los siete reinos de la Tierra —y no veo cómo podrían querer decir otra cosa— entonces la pregunta se responde en mi respuesta a su Pregunta (2) y si es así entonces los cinco de los siete ya están enumerados. Los dos primeros están relacionados al igual que el tercero, con la evolución de los elementales y del reino Interior. (6) Si tenemos razón entonces la existencia total antes del período del hombre es 637. ¿Es esto correcto? ¿O hay siete existencias en cada clase de cada reino, 4459? ¿O cuáles son los números totales y cómo se dividen?
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Un punto más. En estos reinos inferiores ¿es el número de vidas, por así decirlo, invariable, o varía, y, si es así, cómo, por qué y dentro de qué límites? (6) Al no permitírseme darle toda la verdad, o divulgar el número de fracciones aisladas, no puedo satisfacerlo dándole el número total. Tenga la seguridad mi estimado Hermano, de que para quien no busca convertirse en un ocultista práctico estos números son irrelevantes. Incluso a nuestros altos chelas se les niegan estos pormenores hasta el momento de su iniciación en el adeptado. Estas cifras como ya he dicho están entrelazadas de modo tal con los misterios psicológicos más profundos que divulgar la clave de dichas
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cifras, sería poner la vara del poder al alcance de todos los hombres inteligentes que leyeran su libro. Todo lo que puedo decirles es que dentro del Manvantara Solar el número de existencias o actividades vitales de la mónada es fijo, pero hay variaciones locales en el número de sistemas menores, mundos individuales, Rondas y anillos mundiales, de acuerdo a las circunstancias. Y en esta conexión recuerde también que las personalidades humanas a menudo son extinguidas, mientras que las entidades, ya sean individuales o compuestas completan todos los círculos de necesidades menores y mayores bajo cualquier forma.
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(7) Hasta ahora esperamos haber sido tolerablemente correctos, pero al tratar sobre el Hombre nos hemos confundido. (7) Y no es de extrañar, ya que no se le dio la información correcta. (7a) ¿La mónada como Hombre (hombre-mono y hacia arriba) hace una o siete rondas como se definió anteriormente? Entendemos que es lo último. (7a) Como hombre-mono, realiza tantas rondas y anillos como cualquier otra raza o clase; es decir, realiza una Ronda y en cada planeta del "A" al "Z" tiene que pasar por siete razas principales del hombre simiesco, la misma cantidad de subrazas, etc., etc. (Ver notas complementarias) que la raza descrita anteriormente.
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(7b) ¿En cada ronda su círculo mundial consta de siete vidas en siete razas (49) o de sólo siete vidas en una raza? ¿No estamos seguros de cómo ustedes utilizan la palabra raza, si sólo hay una raza por cada estación de cada ronda, es decir, una raza por cada círculo mundial o si hay siete razas (con sus siete ramificaciones y una vida en cada una en cualquier caso) en cada círculo mundial? Además, por cómo ustedes utilizan las palabras "y a través de cada una de estas el Hombre tiene que evolucionar antes de que pase a la siguiente raza superior y eso siete veces", no estamos seguros de que no haya siete vidas en cada ramificación, como usted la llama, subraza nosotros, si le parece bien, la llamaremos. Así que ahora puede haber siete rondas cada una con siete razas, cada una con siete
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subrazas, cada una con siete encarnaciones = 13 x 7 x 7 x 7 = 31 213 vidas, o una ronda con siete razas y siete subrazas y una vida en cada una = 13 x 7 x 7 = 637 vidas o sea 4459 vidas. Por favor aclárenos aquí indicando el número normal de vidas (el número exacto variará debido a idiotas, niños, etc., que no cuentan) y cómo se dividen. (7b) Como la raza descrita anteriormente: es decir, en cada planeta —incluida nuestra Tierra— tiene que realizar siete anillos a través de siete razas (una en cada una) y 7 x 7 progenies. Hay 7 razas raíz, y 7 subrazas o progenies. Nuestra doctrina trata la antropología como un sueño vacío absurdo de los religiosos y se limita a la etnología. Es posible
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que mi nomenclatura sea defectuosa: tiene la libertad en tal caso para modificarla. Lo que yo llamo "raza" usted quizás llamaría "tronco" aunque subraza expresa mejor lo que queremos decir que la palabra familia o división del género homo. Sin embargo, para aclararles hasta ahora diré: una vida en cada una de las siete razas raíces; siete vidas en cada una de las 49 subrazas, o 7 x 7 x 7 = 343 y sume 7 más. Y luego una serie de vidas en razas progenie y ramificadas; haciendo las encarnaciones totales del hombre en cada estación o planeta 777. El principio de aceleración y retraso se aplica de
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de tal manera, que elimina todas las estirpes inferiores y deja sólo una superior para realizar el último anillo. No es mucho para dividirlo a lo largo de unos millones de años que el hombre pasa en un planeta. Tomemos sólo un millón de años —sospechado y ahora aceptado por la ciencia— para representar el término entero del hombre en nuestra Tierra en esta Ronda; y permitiendo un promedio de un siglo por cada vida, descubrimos que mientras él ha pasado en todas sus vidas en nuestro planeta (en esta Ronda) solo 77 700 años ha estado en las esferas subjetivas 922 300 años. ¡No es un gran estímulo para los reencarnacionistas modernos extremos
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que recuerdan sus varias existencias anteriores! Si quisiera darse el gusto de hacer los cálculos no olvide que en lo antes mencionado solo hemos calculado el promedio de vidas de conciencia y responsabilidad. Nada se ha dicho en cuanto a los fracasos de la Naturaleza en los abortos, idiotas congénitos, muerte de niños en sus primeros ciclos septenarios, ni de las excepciones de las que no puedo hablar. Además debe recordar que la vida humana promedio varía mucho según las Rondas. Aunque estoy obligado a ocultar información sobre muchos puntos sin embargo si usted llegara a resolver cualquiera de los problemas por sí mismo será mi deber
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decírselo. Intente resolver el problema de las 777 encarnaciones. (8) M, dijo que toda la humanidad está en la cuarta ronda, la quinta aún no ha comenzado, pero pronto lo hará. ¿Fue un lapsus? Si no es así, entonces cotejando esto con sus comentarios actuales deducimos que toda la humanidad está en la cuarta ronda (aunque en otra parte usted parecía decir que estamos en la quinta ronda). Que las personas más elevadas ahora en la Tierra pertenecen a la primera subraza de la quinta raza, la mayoría a la séptima subraza de la cuarta raza pero con restos de las otras subrazas de la cuarta raza y la séptima subraza de la tercera raza. Le rogamos que nos aclare bien esto. (8) M. sabe muy poco
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inglés y detesta escribir. Pero incluso yo podría muy bien haber usado la misma expresión. Unas pocas gotas de lluvia no hacen un monzón aunque lo presagien. La quinta ronda no ha comenzado en nuestra Tierra y las razas y subrazas de una ronda no deben confundirse con las de otra ronda. Se puede decir que la quinta ronda de la humanidad habrá "comenzado" cuando no quede en el planeta que precede al nuestro un solo hombre de esa Ronda y en nuestra Tierra ni uno de la cuarta ronda. Debe saber también que los ocasionales hombres de la quinta ronda (y son muy pocos y
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escasos) que aparecen entre nosotros como mensajeros precursores no engendran en la progenie de la quinta ronda de la Tierra. Platón y Confucio fueron hombres de la quinta ronda y nuestro Señor un hombre de sexta ronda (el misterio de su avatar se trata en mi próxima carta) e incluso el hijo de Gautama Buda fue apenas un hombre de la cuarta ronda. Nuestros términos místicos en su torpe retraducción del sánscrito al inglés son tan confusos para nosotros como lo son para ustedes, especialmente para M. a menos que al escribirles a ustedes uno de nosotros tome su pluma como un adepto y la utilice desde la primera palabra hasta la última en
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calidad de tal es tan susceptible de "lapsus" como cualquier otro hombre. No, no estamos en la quinta ronda, pero los hombres de la quinta ronda han estado viniendo en los últimos miles de años. Pero, ¡qué es un mísero lapso de tiempo en comparación con incluso un millón de los varios millones de años que abarca la ocupación de la Tierra por el hombre en una sola ronda! Por favor, examine cuidadosamente las pocas cosas adicionales que le doy en las hojas volantes. Damodar ha recibido órdenes de enviarle la Nº 3 de las cartas de Terry: un buen material para el folleto Nº 3 de Fragmentos de la Verdad Oculta.
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NOTA: Esta página no tiene texto, sólo el diagrama. |
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Esta figura representa aproximadamente el desarrollo de la humanidad en un planeta, digamos nuestra Tierra. El hombre evoluciona en siete razas principales o razas raíces; 49 razas menores; y las razas subordinadas o progenies, las razas ramificadas que provienen de estas últimas no se muestran. Las flechas indican la dirección tomada por el impulso evolutivo. I, II, III, IV, etc., son las siete razas principales o raíces. 1, 2, 3, etc., son las razas menores. a, a, a, son las razas subordinadas o progenie. N, el punto inicial y terminal de la evolución en el planeta. S, el punto axial donde el desarrollo se equilibra o se ajusta en cada evolución de cada raza. E, los puntos ecuatoriales donde en el arco descendente |
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el intelecto supera a la espiritualidad y en el arco ascendente la espiritualidad aventaja al intelecto. (N.B. — Lo anterior hecho a mano por D.K. —el resto por K.H.—APS.) PD — Con el apuro D.J.K. ha hecho que la figura se incline un poco fuera de la perpendicular, pero servirá como un apunte estimativo. Lo dibujó para representar el desarrollo en un solo planeta; pero yo he añadido una que otra palabra para que se aplique también (de hecho se aplica) a toda una cadena mavantárica de mundos. Notas suplementarias
Cada vez que se le presente una duda sobre evolución o desarrollo en cualquier Reino, tenga siempre en cuenta que
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todo se ajusta a la regla Septenaria de la serie en sus correspondencias y relación mutua en toda la naturaleza. En la evolución del hombre hay un punto superior, un punto inferior, un arco descendente y un arco ascendente. Como es el "Espíritu" el que se transforma en "materia" y (no la "materia" la que asciende, sino) la materia la que se convierte una vez más en espíritu, por supuesto la primera evolución de la raza y la última en un planeta (como en cada ronda) debe ser más etérea, más espiritual, la cuarta o la más baja más física (progresivamente, por supuesto, en cada ronda) y al mismo tiempo —ya que la inteligencia física
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es la manifestación velada de la inteligencia espiritual— cada raza evolucionada en el arco descendente debe ser más físicamente inteligente que su predecesora, y cada una en el arco ascendente tiene una forma más refinada de mentalidad mezclada con intuición espiritual. La primera raza (o estirpe) de la primera ronda después de un manvantara solar (por favor espere mi próxima carta antes de que vuelva a confundirse o embrollarse. Le explicará mucho) sería entonces una raza de hombres dioses con una figura casi intangible, y así es; pero luego surge la dificultad para el estudiante: reconciliar
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este hecho con la evolución del hombre a partir del animal, por muy alta que sea su forma entre los antropoides. Y sin embargo es conciliable, para quienquiera que se aferre religiosamente a una estricta analogía entre las obras de los dos mundos, el visible y el invisible, un mundo, de hecho, ya que uno trabaja dentro de sí mismo por así decirlo. Ahora hay, debe haber "fracasos" en las razas etéricas de las muchas clases de Dyan Chohanes o Devas así como entre los hombres. Sin embargo debido a que estos fracasos están demasiado avanzados y espiritualizados para ser obligados a retroceder desde su estado de Dyan Chohan
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hacia el vórtice de una nueva evolución primordial a través de los reinos inferiores, entonces esto es lo que sucede. Cuando ha de evolucionar un nuevo sistema solar, a estos Dyan Chohanes (recuerde la alegoría hindú de los Devas Caídos lanzados por Siva a Andarah a quienes Parabrahm les permite considerarlo como un estado intermedio donde pueden prepararse mediante una serie de renacimientos en esa esfera para un estado superior: una nueva regeneración) la oleada los hace nacer "por delante" de los elementales y permanecer como una fuerza espiritual latente o inactiva en el aura del mundo naciente de un nuevo sistema
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hasta que se alcanza la etapa de la evolución humana. Entonces el Karma los ha alcanzado y tendrán que aceptar hasta la última gota de la amarga copa de la retribución. Luego se convierten en una Fuerza activa y se mezclan con los Elementales, o entidades avanzadas del reino puramente animal para desarrollar poco a poco el tipo completo de humanidad. En esta combinación pierden su inteligencia superior y su espiritualidad dévica, para recuperarlas al final del séptimo anillo de la séptima ronda. Así tenemos: 1.ª Ronda. Un ser etéreo, no inteligente, pero superespiritual. En cada una de las
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subsiguientes razas y subrazas y razas menores de evolución se convierte cada vez más en un ser encapsulado o encarnado, pero aún preponderantemente etéreo. Y al igual que el animal y el vegetal desarrolla cuerpos monstruosos correspondientes a su tosco entorno. 2.ª Ronda. Él es todavía gigantesco y etérico, pero su cuerpo se torna cada vez más firme y más condensado, un hombre más físico, pero aún menos inteligente que espiritual; porque la mente es una evolución más lenta y más difícil que la estructura física y la mente no se desarrollaba tan rápidamente como el cuerpo.
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3.ª Ronda. Ahora tiene un cuerpo perfectamente concreto o compacto; al principio la forma de un simio gigante, y más inteligente (o más bien astuto) que espiritual. Porque en el arco descendente él ahora ha alcanzado el punto en que su espiritualidad primordial queda eclipsada u oscurecida por una naciente mentalidad. En la última mitad de esta tercera ronda se reduce su estatura gigantesca, mejora la contextura de su cuerpo (quizá el microscopio podría ayudar a demostrar esto) y se convierte en un ser más racional, aunque todavía es más un simio que un hombre Deva.
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desarrollo enorme en esta ronda. Las razas mudas adquieren el lenguaje humano, en nuestro globo, en el cual a partir de la cuarta raza se perfecciona el lenguaje y aumenta el conocimiento de las cosas físicas. En este punto medio de la cuarta ronda, la Humanidad pasa el punto axial del círculo manvantárico menor. (Además, en el punto medio de cada evolución principal o raza raíz de cada ronda, el hombre pasa el ecuador de su curso en ese planeta, la misma regla se aplica a toda la evolución o las siete rondas del Manvántara menor: 7 rondas divididas por 2 = 3 1/2 rondas).
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En este punto entonces el mundo rebosa de los resultados de la actividad intelectual y la disminución espiritual. En la primera mitad de la cuarta raza, nacieron las ciencias, las artes, la literatura y la filosofía, se eclipsaban en una nación, renacían en otra, la civilización y el desarrollo intelectual girando en ciclos septenarios como el resto; mientras que es sólo en la segunda mitad que el Ego espiritual comenzará su verdadera lucha con el cuerpo y la mente para manifestar sus poderes trascendentales. ¿Quién ayudará en la gigantesca batalla que se avecina? ¿Quién? Dichoso el hombre que ayuda a una mano generosa.
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5.ª Ronda. El mismo desarrollo relativo, y continúa la misma lucha. 6.ª Ronda 7.ª Ronda De estas dos últimas no precisamos hablar. |
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Contexto y antecedentes
Esta carta contiene preguntas de AOH y respuestas de KH. Las respuestas de KH están en negrita.
Descripción física de la carta
El original se encuentra en la Biblioteca Británica, Folio 6A. George Linton y Virginia Hanson discutieron esta carta junto con la Carta N.° 67:
Estas dos cartas, que contienen preguntas de AOH y respuestas de KH, se encuentran entre las más importantes del libro desde un punto de vista técnico. Los originales no están disponibles, pero fueron copiadas por APS en su cuaderno, en el que conservó copias de varias cartas importantes. Parece probable que se trate de copias exactas. El cuaderno se encuentra en el Museo Británico. [1]
Notas
- ↑ George E. Linton and Virginia Hanson, eds., Readers Guide to The Mahatma Letters to A. P. Sinnett (Adyar, Chennai, India: Theosophical Publishing House, 1972), 118.